Hola a todos. Hoy os traigo la reseña de una novela para los más pequeños de la casa. Se trata del primer volumen de las aventuras de Alfred & Agatha, Los diez pájaros Elster, de la autora Ana Campoy y publicado por Edebé.
La autora, Ana Campoy, amante del séptimo arte, ha querido hacer un guiño al cine y a la literatura llamando a sus protagonistas Alfred (en honor al director de cine Alfred Hitchcock) y Agatha (en honor a la novelista Agatha Christie). A partir de aquí, la autora ha imaginado cómo sería la vida de estos dos niños si se hubieran conocido.
Alfred&Agatha es una novela muy bien planteada desde la primera página, con dos protagonistas muy diferentes, aunque se complementan a la perfección. Nos presenta a un Alfred inquieto y soñador. La otra protagonista es Agatha, una niña adinerada, con una mente despierta y segura en sus decisiones. En este equipo hay otro personaje casi tan importante como Alfred y Agatha. Se trata de Morritos Jones, una perra a la que solo le falta hablar.
Durante la trama la autora hace gala de su pasión por el cine y va dejando detalles para los amantes, que como yo, aman este arte. Hace una buena combinación entre el cine y la literatura, otro detalle que es de agradecer. Además, la narración es ágil y mantiene al lector en todo momento pegado a sus páginas.
Otro elemento a destacar es el lenguaje que usa la autora en esta primera entrega. Sabe en todo momento qué quiere contar y a quien dirigida la novela. No escatima en utilizar adjetivos “raros” que obligan al lector de menos edad a visitar el diccionario.
Con esta novela Ana Campoy me ha convencido, no ya solo porque maneja muy bien la trama de suspense, sino también porque ha creado a dos personajes entrañables. Este tipo de novelas me recuerdan a las lecturas que leía con pasión en mi niñez como son Los cinco, Los tres investigadores o Los Hollister, por poner un ejemplo. Tanto aquellas lecturas como esta que nos ocupa son de largo recorrido y le auguro un buen futuro.
Solo me queda decir que estas novelas son estupendas para los chavales de diez u once años, aunque como todas las buenas historias, esta también la recomiendo para todos aquellos que aún conservan un espíritu más joven.